[Crítica] Nunca jamás: infancias precarizadas y fantasiosas

Este montaje se inspira en una investigación académica «Infancia institucional y vida cotidiana en las residencias de protección de Santiago de Chile (1979- 2000)”, de las sicólogas Patricia Castillo y Claudia Hernández, y que antes se materializó en un libro (2019) y exposición (2021, en GAM) con el título Infancia/dictadura: testigos y actores. Desde su origen, la investigación fue pensada para trascender los estrechos límites académicos y confluir con los lenguajes artísticos para dar cuenta de este tema acuciante.

Esa perspectiva o intención transdisciplinar le da una singularidad al montaje, pero además una exigencia adicional, puesto que más allá de los contornos ficcionales debiera mantener la coherencia y el impacto de una investigación original de largo alcance y datos cuantificables al ser llevado a un lenguaje artístico. En ese sentido, son más los riesgos que las garantías en una adaptación de este tipo. “Nunca jamás” aborda esta cuestión desde una óptica cargada a lo pedagógico, en ilustrar los contornos de esta infancia precarizada un poco reiterativamente.

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En ese sentido, la ficción sobre un empresario que sueña con que los hogares sean administrados por los propios niños, un sistema inspirado por el país de Nunca jamás, se revela un poco inocente en sus alcances políticos, más como una proyección de los traumas del protagonista -que insistentemente nos dan cuenta de un deseo- que de la acuciante realidad de los hogares de acogida y el fracaso del Estado.

Ese complejo equilibrio la obra lo resuelve solo a medias, perdiendo potencia dramática porque las líneas narrativas del relato no terminan de confluir, pese a que la puesta en escena de objetos modulares (y una suerte de doppelgangers que movilizan la acción) y los juguetes diseñados por el artista visual Norton Maza son lo más interesante del montaje. Curioso caso: lo más logrado parece no dialogar con fluidez con la dramaturgia y sus contornos.

«Nunca jamás»

Funciones en Teatro Nacional Chileno, hasta sábado 28 octubre, 19:30 hrs.

Dirección: Mario Monge

Dramaturgia y asistencia de dirección: Sebastián Carez-Lorca

Elenco: Belén Herrera, Nicolás Pavez, Nicole Vial, Sol Barrera, Karla Torres, Cristóbal Bravo

Diseño escénico: Norton Maza

Diseño de iluminación: Andrés Poirot

Diseño de vestuario: Fabián Torres

Asistencia de diseño: Nicolás Zapata

Diseño sonoro: Vicente Cuadros

Investigación: Patricia Castillo y Claudia Hernández del Solar

Producción: Teatro Nacional Chileno

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